lunes, 15 de marzo de 2010

Sermones del guardián de la devoción I - Capítulo XII

CAPITULO DOCE


Cada palabra es una canción

ISKCON desire tree - Rupa Goswami Appearance 02

ISKCON desire tree - Rupa Goswami Appearance 02 por ISKCON desire  tree.


ISKCON desire tree - Rupa Goswami Appearance 01

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Donde cada palabra es una canción, cada paso es un baile y la flauta es el asistente favorito”.

Ärî Ärî Brahma-saêhitâ


Cada palabra es una canción... pero no es un sonido de este plano. Este viene de otro mundo, de otro mundo que es tierno, dulce y captura el cora­zón. Es un mundo donde el comportamiento correcto ocurre de una forma armoniosa y dulce. Cada palabra es como una canción (kathâ gânam). Cada movimiento es dulce, como bailando (nâtyaê gamanam api). En esta forma ha sido descrito. Todo está lleno de belleza del grado más excelso. Ésta es la tierra de la belleza; allí todo es hermoso y tiene el toque de la belleza divina. La causa primordial es encantadora, atractiva y cautiva el corazón y el alma: “¡Detente!”

Hay una tierra con tal vida, nuestra aspiración está en ella (râdhikâ-mâdha­vâäâm). Podemos abrigar sinceramente la idea de sentir atracción por ese plano, donde todo es de un carácter musical. La flauta de Kèëòa lo guía todo. Incluso puede sacar la vida del cuerpo.

Es tan encantador ese sonido, que parece que el mismo sentimiento de uno quisiera salirse de la existencia corporal. Cualquier parte de nuestro cuerpo que sea tocada con semejante clase de proceder, parece desconectarse de las otras partes y correr a juntarse con el sujeto (si es posible imaginar esto). Si hay color, el ojo quiere percibirlo, como separándose de las otras partes del cuerpo. Hay tal competencia: “Yo no quiero tu conexión, ¡oh cuerpo! Quiero correr hacia esa dirección; el llamado viene de allá”. Las manos, los ojos, el tacto todas las facultades competirán; cualquier parte que sea tocada deseará soltarse de sus amigables compañeros.

Una vez, después de conducir el parikramâ (circunvalación) en todo el Vraja-maòàala (el perímetro de Ärî Vèndâvana), Ärîla Bhaktisiddhânta Sa­rasvatî Prabhupâda preguntó a sus discípulos: “¿Cuál de los pasatiempos les atrajo más? ¿Qué sitio en Vèndâvana les ha cautivado más?” Cuando él hizo estas preguntas, yo contesté que el que más me atrajo fue Kadamkhâòài, el lugar de bhajana de Ärîla Rûpa Gosvâmî Prabhu. El âärama a medio camino entre Nandagrâma y Yâvaùa donde, establecido Rûpa Gosvâmî, solía escribir su libro Ärî Bhakti-rasâmèta-sindhuì. Nuevamente después de uno o dos años, cuando fuimos al Ärî Râdhâ-kuòàa en la compañía de Ärîla Prabhu­pâda, repentinamente él señaló: “Tu lugar. Ese es tu lugar”. Estuve sorpren­dido. “¿Qué, dónde está mi lugar?” Él dijo: “Tu lugar, el Kadamkhâòài, el lugar de Ärîla Rûpa Gosvâmî”. Yo pensé: “¡Oh! Él tuvo algún propósito cuando hace un año o dos indagó a sus discípulos acerca del sitio más atrac­tivo; él mantuvo estas cosas en su mente y de acuerdo con eso él ahora está diciendo: ‘Tu lugar’”.


El Guru es el timonel


Así él fue muy particular acerca del ruci-parîkëâ o examinar el gusto particu­lar de una persona por un lîlâ particular y un grupo particular de servicio. Es necesario para el Âcârya examinar a su discípulo y señalar el lugar donde será ubicado. Él debe determinar dónde está situado su discípulo y ayudarle, de acuerdo y en armonía con ese gusto innato, en su marcha hacia la tierra de su aspiración.

El destino ha sido establecido, pero ¿cómo lo alcanzaré? ¿Cuándo lo alcan­zaré? Aquellos que vienen en mi ayuda para llevarme allá, ellos son mis Maestros, mis Gurus: Äikëâ-guru y Dikëâ-guru. Quienquiera que me ayude a llegar allá es mi Guru. El que me ayude a alcanzar el sitio de mi destino, el lugar de mi anhelo íntimo, es mi guía (râdhikâ-mâdhavâäâê prâpto yasya prathitaì kèpayâ ärî-guruê taê nato ‘smi). Él me ha ayudado a establecer mi destino; después me instruyó cómo y a qué aspirar y cómo alcanzar ese ambicionado refugio elevado. He obtenido todas esas cosas por intermedio suyo. Él es todo en mi vida. Hay un barco y él es timonel (guru-karòa-dhâram).

Me he rendido a él, lo he aceptado. He abordado su barco y me está llevando hacia la meta de mi vida.

El cuerpo humano (nè-deham) ha sido comparado con un barco. Utilizando los recursos de este cuerpo y mente, mi Gurudeva, que es el timonel, me está guiando hacia la meta. Al haber llegado a la forma de vida humana aquél que no aprovecha esta oportunidad comete suicidio. Él comete suicidio por no aprovecharse y cruzar el océano de la vida y la muerte, nacimiento y muerte.


nr-deham adyaê sulabhaê sudurllabhaê

plavaê sukalpaê guru-karòadhâram

mayânukûlena nabhasvateritaê

pumân bhavâbdhiê na taret sa âtmahâ

Ärîmad-Bhâgavatam 11.20.17


Aquí, el Señor está infiriendo: “Muchos barcos están cruzando y como un viento favorable Yo les estoy ayudando. El timonel es el Guru y Yo soy el viento favorable. El barco es este cuerpo humano y deberían tomar esta oportunidad para cruzar el océano de la vida, nacimiento y muerte. El mundo es comparado con el infinito. Es parecido a la infinidad; es muy difícil cruzar el océano de la vida y la muerte, nacimiento y muerte”. Si quieres escapar de estas molestias (janma-mètyu-jarâ-vyâdhi-duìkha-doëânudaräanam), tienes que aceptar la oportunidad. De otra manera, perderás tanto que equivaldrá al suicidio.


Primero dirígete a Nityânanda


La misericordia de Ärî Caitanya Mahâprabhu presupone alguna selección, pero la misericordia de Ärî Nityânanda Prabhu no tiene preferencias. A cual­quiera que se le atraviesa le da Su misericordia; Nityânanda Prabhu es tan magnánimo que salva a cualquiera que se le atraviesa en su camino. Su misericordia es tan cruda, indiscriminada y amplia. Nityânanda Prabhu es de lo más benévolo. Mahâprabhu hace alguna clase de discriminación, pero a Nityânanda Prabhu no le importa, no hace ninguna discriminación sea quien sea. Sea un candidato apto o no, aun así es considerado entre los merecedo­res. Así es Su misericordia.

Nunca oses acercarte a Ärî Ärî Râdhâ y Kèëòa, descuidando la gracia del Señor Nityânanda (hena nitâi vine bhâi, râdhâ-kèëòa pâite nâi). Así, nuestro venerado Ärîpâda Bhaktivedanta Svâmî Mahârâja hizo hincapié en Nityânanda Prabhu. Nityânanda Prabhu es el Señor Balarâma. La gracia de Nityânanda Prabhu es importante para los caídos; Su gracia es la verdadera riqueza para ellos, porque en Él la discriminación no existe. Aunque no mucho, encontramos alguna clase de discriminación en la magnanimidad del Señor Gaurâôga. Pero Nityânanda Prabhu es más generoso; primero dirígete a Nityânanda Prabhu y por su gracia podrás llegar a Mahâprabhu. Por la gracia de Mahâprabhu fácilmente alcanzarás a Ärî Ärî Râdhâ-Govinda en Vèndâvana. Este es el camino que se nos ha mostrado.


yathâ yathâ gaura-padâravinde

vindeta bhaktiê kèta-puòya-râäiì

tathâ tathotsarpati hèdy akasmâd

râdhâ-padâmbhoja-sudhambu-râäiì

Ärî Caitanya-candrâmèta 88


A medida que la devoción a los pies de loto de Ärî Gaurasundara es alcan­zada por una persona muy piadosa, inesperadamente nace dentro de su corazón el océano de néctar el cual es el servicio a los pies de loto de Ärî Ärî Râdhâ”.

Purificado por la misericordia de Ärî Gaurâôga, trata de aproximarte a Ärîmatî Râdhârâòî. Entonces no habrá posibilidad de que cualquier debilidad entre en ti y te perturbe en este plano. Eso será purificado por Ärî Gaurâôga. Si tienes el refugio de Ärî Gaurâôga puedes estar seguro de que estarás muy protegido y sin peligro y obtendrás íntimamente el servicio a Ärîmatî Râdhârâòî. De otra forma es muy peligroso y a veces mortal. Si no te aproxi­mas por intermedio de Ärî Gaurâôga, el intento será reaccionario. Es muy peligroso aproximarse directamente a Ärî Vèndâvana y a Ärîmatî Râdhârâòî. Tienes que acercarte comandado por Ärî Gaurâôga. En otras palabras, si puedes apreciar la vida e ideal de Ärî Gaurâôga, entonces kâma (deseo mun­dano), etc., será completamente eliminado para poder ser aceptable en el dominio del lîlâ más elevado.


Kèëòa quiere el polvo de los pies de Ärîmatî Râdhârâòî


Aquí, en Koladvîpa, Ärî Caitanya Mahâprabhu dio a todos lo mejor de Sí (kuliyâ-grâmete âsiärî-kèëòa-caitanya hena nâhi, ya ‘re prabhu karilâ dhanya). Él dio el servicio más deseable, el servicio del tipo más dulce. Tal servicio se encuentra en Vèndâvana y Mahâprabhu Ärî Caitanyadeva reco­mendó la vida de Vèndâvana como la más elevada. Ni el conocimiento ni el poder pueden aproximarse a este servicio de Vèndâvana. En Vèndâvana el corazón lo es todo. Ärî Uddhava también dijo:


âsâm aho caraòa-reòu-juëâm ahaê syât

vèndâvane kim api gulma-latauëadhînâm

yâ dustyajaê svajanam ârya-pathañ ca hitvâ

bhejur mukunda-padavîê ärutibhir vimègyâm

Ärîmad-Bhâgavatam 10.47.61

Ignorando la sociedad e incluso las Escrituras, ellas (las gopîs) se rindieron al Absoluto, abandonaron a sus parientes y a lo que es socialmente conside­rado como sagrado; abandonaron todo por causa del servicio al Señor”. Así pues, Uddhava, el devoto de la clase más elevada, dijo: “Yo aspiro nacer como una brizna de hierba o alguna planta en Vèndâvana; así fácilmente el polvo de los pies de las gopîs se deslizará en mi cabeza”. Así de elevada es la posición de las gopîs y Vèndâvana. Ärî Caitanya Mahâprabhu recomendó aquello, con la característica adicional de distribuirlo a otros. Dándoselo a otros se puede obtener conexión amplia con tal vida divina.

Todas las concepciones de dharma (deber), adharma (irreligión), jñâna (conocimiento, renunciación, liberación), etc., todas estas cosas son muy bajas en comparación con los asuntos de Vèndâvana. Aquí, el corazón lo es todo. Cualquiera que tenga la tenacidad para seguir esta línea tiene la más grande esperanza de éxito en su vida.

Y otra vez, diëùyâ yad âsin mat sneho, bhavatinâê mad âpanah (Ärîmad-Bhâgavatam 10.42.44): “Se supone que quien obtiene Mi conexión es afor­tunado, pero Yo considero Mi fortuna haber obtenido su asociación (de las gopîs). Otros dicen que cualquiera que obtenga Mi conexión es afortunado. Pero Yo mismo me considero afortunado por tener su asociación. Es seguro que seré de ustedes, siempre de ustedes”. Tales cosas fueron habladas por Kèëòa cuando se encontró con las gopîs en Kurukëetra. Semejantes cosas son inalcanzables; la gente común ni siquiera puede pensar que sea posible seme­jante vida elevada. Bhaktyâ sañjâtayâ bhaktyâ (Ärîmad-Bhâgavatam 11.3.31): Bhakti producirá más bhakti y de esta manera, ese bhakti también producirá más bhakti. Ninguna otra cosa viene como una fruta, sólo el bhakti: Es su propia recompensa


yasyâì kadâpi vasanâñcala-khelanottha-

dhanyâtidhanya-pavanena kètârthamânî

yogindra-durgama-gatir madhusûdano ‘pi

tasyâì namo’stu vèëabhânubhuvodiäe ‘pi

Ärî Prabodhânanda Sarasvatîpâda


Aquí se ha dicho que una vez que la corriente del viento había tocado alguna parte de la ropa o el vestido de Ärîmatî Râdhârâòî, el mismo viento tocó el cuerpo de Kèëòa y Kèëòa estuvo en un estado de excitación extrema, con alegría, con regocijo, con placer. “¡Oh! ¡He sido tocado por el mismo viento que rozó el vestido de Râdhârâòî, soy tan afortunado!” ¿Y quién es ese Kèëòa? Todos los expertos religiosos, eruditos, yogîs, etc., están anhelando la gracia de Kèëòa, ese mismo que se considera afortunado si obtiene un pequeño toque de la brisa que rozó el vestido de Ärîmatî Râdhârâòî. Tan pura es Ärîmatî Râdhârâòî. Su rendición, su servicio, es tan puro, que incluso un toque de ese viento hace a Bhagavân, Kèëòa, la Suprema Personalidad de Dios, pensar que Él ha ganado la fortuna más elevada. Él siente: “Estoy tan satisfecho en Mi vida”.

La posición de Ärîmatî Râdhârâòî es la primera y más elevada en la vanguardia. Ärî Jayadeva Gosvâmî ha escrito que Kèëòa quiere el polvo de los pies de Ärîmatî Râdhârâòî (dehi pâda-pallavam udâram, Gîtâ-govinda). Cual­quier persona ordinaria no puede entender esto. Solamente los seguidores de Ärî Caitanya Mahâprabhu, por Su gracia, pueden entender algo de la sustan­cia del Râdhâ-dâsya, el servicio de Ärîmatî Râdhârâòî. Así Râdhâ-dâsya es la aspiración más elevada del gauàîya vaiëòava.


Todos pueden conseguir las bendiciones de Ärî Caitanyadeva”


Después que Ärî Caitanya Mahâprabhu tomó sannyâsa, el recorrió el sur de la India y conquistó las concepciones religiosas del lugar. En Benarés, Ärî Svarûpa Dâmodara también quiso tomar sannyâsa, pero la ceremonia fue hecha a medias. Cuando el Señor llegó a Purî, Ärî Svarûpa Dâmodara se volvió como un loco y en la mitad de su ceremonia de sannyâsa corrió a Purî. Su nombre fue Puruëottama, y su nombre de brahmacârî fue Svarûpa Ânanda. Así, todavía con este nombre, él corrió a Purî, como un hombre loco, para ver a su guardián, su amigo, su todo. Él saludó a Ärî Caitanyadeva con este äloka:


heloddhûnita-khedayâ viäadayâ pronmîlad âmodayâ

äâmyac-châstra-vivâdayâ rasadayâ cittârpitonmâdayâ

äaävad-bhaktivinodayâ äamadayâ mâdhurya-maryâdayâ

ärî-caitanya-dayânidhe tava dayâ bhuyâd amandodayâ

Ärî Caitanyacandrodaya-nâùaka


¡Oh océano de misericordia! Ärî Caitanya, la misericordia que disipa fácil­mente toda lamentación, la misericordia dentro de la cual la pureza absoluta reside, la misericordia dentro de la cual el éxtasis supremo es revelado (opacando todo lo demás), la misericordia por cuya aparición todos los deba­tes de las Escrituras llegan a su conclusión, la misericordia cuyos pasatiempos de amor divino cautivan todas las direcciones, pueda por Su dulzura absoluta toda Su misericordia expansiva, la otorgadora de toda bondad, despertar en nuestros corazones”.

Ärî Svarûpa Dâmodara cayó a los pies de Ärî Caitanyadeva con este äloka en sus labios. “¡Oh gran océano de misericordia! Ärî Caitanyadeva, permite que Tu gracia sea distribuida a todos. Esta gracia la cual una vez iniciada nunca finaliza; en ninguna otra onda, nunca producirá ninguna cosa mala de aquí en adelante. Tu dayâ, Tu misericordia, es de tal calidad que si alguien obtiene una partícula, en poco tiempo esa misericordia eliminará cualquier mala posición. Mando significa ‘mala posición’, así amandodayâ es tal dayâ que en ningún tiempo traerá cosas inauspiciosas”. Cayendo a Sus pies como un amigo frenético, Ärî Svarûpa Dâmodara cantó este äloka a Ärî Caitanya­deva. En la línea de instrucción de Ärî Caitanyadeva, Ärî Svarûpa Dâmodara es primero, luego Ärî Rûpa, Sanâtana (viävambhara priyaôkara, ärî-svarûpa-dâmodara, ärî-gosvâmî rûpa-sanâtana). Tal es la posición de Ärî Svarûpa Dâmodara. En Vèndâvana, su posición es la de Lalitâ-sakhî. Bhuyâd significa âäirvâda, bendiciones: “Yo otorgo mis bendiciones a todos y cada uno. Todos pueden conseguir las bendiciones de Ärî Caitanyadeva”.


El sentimiento es la base de todo


Una insinuación del modelo particular del servicio de Ärîmatî Lalitâdevî ha sido dada por Ärîla Rûpa Gosvâmî:


râdhâ-mukunda-pada-sambhava-gharmabindu-

nirmañcanopakaraòe kèta-deha-lakëyâm


Cuando Ärî Lalitâdevî encuentra una gota de sudor en los pies de Ärî Ärî Râdhâ-Govinda, ella misma se ocupa de removerlo. “¿Cómo apareció esto ahí? Estamos andando a su alrededor para ver que ni el más leve dolor pueda entrar este dominio a perturbarlos. Pero ¿cómo ha aparecido esta gota de sudor sin que nosotras lo notáramos? ¡Sudor, sudor!” Así furiosamente, se castiga a sí misma e inmediatamente quiere tomar nacimiento un lakh (cien mil) de veces; con esa fuerza ella viene a remover esa gota de sudor de los pies de loto de cualquiera de la Divina Pareja. Si la mínima dificultad es vista en el área del servicio, los asociados del Señor no pueden tolerarlo de ninguna manera, semejante anhelo, seriedad y autocensura se encuentra en ellos. Ärî Caitanya Mahâprabhu dijo:


sanâtana,deha-tyâge kèëòa yadi pâiye

koti-deha ksaneke tabe châdite pâriye

Caitanya-caritâmèta, Antya 4.56

¡Oh Sanâtana! Para obtener el servicio de Kèëòa, inmediatamente quiero morir millones de veces. Estoy listo para abrazar diez millones de muertes si eso me ayudara a servirle”.

Hlâdinî-äakti, la potencia del sentimiento, es Ärîmatî Râdhârâòî. Incluso ella siente disgusto en su interior: “Yo no puedo”. Esto apoya la posición extrema: “No puedo hacer mi servicio, mi deber; no puedo hacerlo”.

En su encuentro en Syamanta-pâncaka en Kurukëetra, repentinamente Kèëòa cayó a los pies de Ärîmatî Râdhârâòî e imploró perdón: “Yo soy un criminal, un ofensor de tu posición. Tú eres tan rendida, no pude cumplir con Mi verdadero deber hacia Ti. Tu servicio a Mí es tan amoroso, no puedo cumplir Mi deber hacia Ti”. Pero Ärîmatî Râdhârâòî dijo: “Soy Yo quien cometió ofensas, porque a pesar de Tu separación, todavía estoy viviendo. Eso prueba que soy una ofensora. Yo soy la ofensora, no Tú, debido a que estoy viviendo. Esa es una prueba suficiente que Yo no soy digna de Ti. ¿Por qué no morí por Tu separación? Esa es la prueba”.

Kèëòa cae a los pies de ella: “Tu posición es tan elevada, tan excelsa. Mien­tras estuve sin ti, incrementaron mis diferentes deberes. Sin tratar de satisfa­certe, me ocupé en considerar diferentes deberes”. Pero Ärîmatî Râdhârâòî dijo: “No, no, yo soy quien ha ofendido, porque no he muerto sin Tu compa­ñía. Encontramos en las Escrituras que el masculino tiene tal libertad, no así el femenino. Así que debería haber muerto en la separación y Tú no come­tiste ofensa al dejarme para hacer muchos deberes aquí y allá. Tú tienes tantos deberes que cumplir, mientras yo estoy sólo para Tu servicio. De esta forma no pude mantener el estándar”. Tal fue el encuentro en Kurukëetra.

De esta manera en los pasatiempos de Kèëòa, las potencias son sandhinî, saêvit y hlâdinî. Hlâdinî mantiene la posición más elevada debido a la auto­rrendición masiva. Luego está saêvit y después la tercera posición es la de sandhinî. Pensar, sentir y desear: Desear es sandhinî pensar es saêvit y sentir es hlâdinî.

Ordinariamente podemos pensar que el sentimiento es lo último de todo, pero no, es lo primero. El sentimiento es lo primero. Al sentimiento verdadero se le ha dado una posición elevada. Todos estamos bajo el efecto del senti­miento. Todos estamos buscando y el sentimiento está comandando. Pensa­mos que el sentimiento es el resultado. No. El sentimiento lo está dirigiendo todo. Primero el sentimiento, luego el pensamiento y entonces la voluntad. Generalmente, los karmîs dan mayor importancia a la voluntad (poder de voluntad) como la directora; y los jñânîs colocan todo en el pensamiento: “Nosotros dirigimos la voluntad, así estamos manteniendo la posición elevada”. Pero el sentimiento está en la base de todo. Él, ella o eso, está dirigiendo todo. Así se ha dicho. Debemos entender la posición del senti­miento.


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Volumen II - Capítulos | | | | | | | | | | 10º | 11º | 12º
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jueves 11 de marzo de 2010

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